El problema carcelario en Venezuela es de larga data, sólo basta recordar la década de los 90, en la que resuenan los ecos de la masacre en el desaparecido retén de Catia en 1992; o la masacre de 1996 en el retén de la Planta, en la que perdieron la vida más de 24 presos a causa de los abusos de autoridad de la Guardia Nacional, o la recordada masacre de la prisión
Sabaneta en Maracaibo, en donde murieron quemados y decapitados, una gran cantidad de presos.
La razón principal: el hacinamiento y la reiterada violación de sus derechos más fundamentales, que imponen dentro de las prisiones la ley del más fuerte.
Prisión de La Sabaneta (Maracaibo, Venezuela). En esta cárcel hay 3 zonas (Máxima, Penal y Reeducación), en las que en cada una de ellas hay un denominado preso comandante, el cual tendrá el máximo respeto de los demás reclusos.
La zona de reeducación es la más codiciada, ya que es donde se encuentra la piscina, gimnasio y demás "lujos" que los presos construyeron hace años. Pero el ser el comandante de ese lugar tiene un precio, ya que son constantes las luchas entre bandas carcelarias por hacerse con el poder de las mismas.
El defensor de derechos humanos recalcó que los presos no sólo deben padecer de la situación de agua potable, atención médica y alimentación paupérrima; también deben sufrir por la falta de imparcialidad, la poca preparación de jueces y fiscales, improvisación del sistema judicial, la violencia, tráfico de armas y droga, hacinamiento en cárceles. “Tenemos uno de los sistemas más dantescos en Latinoamérica”. Señaló que la problemática se resuelve invirtiendo recursos y no llenando cargos a dedo. En una década han pasado unos 12 ministros de Interior y Justicia y 17 directores de prisiones. Se debe lograr la cero circulación de dinero en las cárceles. Así se acaba en 80 por ciento la corrupción dentro de los recintos y se dejan de comprar privilegios. La Guardia Nacional debe abandonar la custodia externa de las prisiones, debe contratarse personal calificado e independizarse el Ministerio Público.
Como siempre os dejo un vídeo que encontré en la red que explica muy bien como se vive en una cárcel Venezolana.
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La razón principal: el hacinamiento y la reiterada violación de sus derechos más fundamentales, que imponen dentro de las prisiones la ley del más fuerte.
Prisión de La Sabaneta (Maracaibo, Venezuela). En esta cárcel hay 3 zonas (Máxima, Penal y Reeducación), en las que en cada una de ellas hay un denominado preso comandante, el cual tendrá el máximo respeto de los demás reclusos.
La zona de reeducación es la más codiciada, ya que es donde se encuentra la piscina, gimnasio y demás "lujos" que los presos construyeron hace años. Pero el ser el comandante de ese lugar tiene un precio, ya que son constantes las luchas entre bandas carcelarias por hacerse con el poder de las mismas.
El defensor de derechos humanos recalcó que los presos no sólo deben padecer de la situación de agua potable, atención médica y alimentación paupérrima; también deben sufrir por la falta de imparcialidad, la poca preparación de jueces y fiscales, improvisación del sistema judicial, la violencia, tráfico de armas y droga, hacinamiento en cárceles. “Tenemos uno de los sistemas más dantescos en Latinoamérica”. Señaló que la problemática se resuelve invirtiendo recursos y no llenando cargos a dedo. En una década han pasado unos 12 ministros de Interior y Justicia y 17 directores de prisiones. Se debe lograr la cero circulación de dinero en las cárceles. Así se acaba en 80 por ciento la corrupción dentro de los recintos y se dejan de comprar privilegios. La Guardia Nacional debe abandonar la custodia externa de las prisiones, debe contratarse personal calificado e independizarse el Ministerio Público.
Como siempre os dejo un vídeo que encontré en la red que explica muy bien como se vive en una cárcel Venezolana.
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